El baile




"Me levanté de la silla, cambié mis zapatillas de andar por casa por las de deporte, me coloqué la coleta. Frente al espejo de mi habitación añadí rimel a mis pestañas y brillo a mis labios. 
Salí por la puerta, estaba impaciente por ir al primer ensayo de baile. En apenas diez minutos, entré por la puerta principal de la clase sonriente, no conocía a nadie. Todos fueron muy simpáticos y amables conmigo. 

Llevábamos la mitad de la clase cuando el profesor mandó formar parejas de chicos y chicas. Alguien interrumpió la clase abriendo la puerta:

-Lo siento, se me ha hecho tarde -Se excusó.

-Más de media hora -miró el reloj-. Que no se vuelva a repetir -dijo el coreógrafo con su fuerte acento francés, el chico que acababa de entrar asintió despacio. 
Me dí la vuelta hacia mis compañeros y vi que estaban todos emparejados, el chico se acercó a mí con una gran sonrisa burlona.

-Supongo que nos toca juntos -dijo sin dejar de sonreír. Me fijé en sus ojos, eran verdes, sabía que la voz no me iba a salir, así que asentí intentando sonreír- ¿Cómo te llamas?

-Edith, ¿y tú?

-Yo soy Jorge, encantado -sonreí.

Fingí interés por lo que el profesor decía, mirando por el rabillo del ojo cada gesto que Jorge hacía, pensando en su mirada, la sonrisa... Él me distrajo de mis pensamientos. 

-¿Está ahí alguien? -Inquirió con tono de burla.

-¿Ahí dónde? -dije molesta.

-En tu cabeza, ¿has escuchado lo que ha dicho el profesor?

-Emm... sí.

-¿Y bien? -Arqueó una ceja.

-Repite... -dije con las mejillas rojas. Una pícara sonrisa se dibujó en sus labios.

-Ha dicho que va a poner una canción y que tenemos que confiar en la pareja, dejarnos llevar por la música. Va a hacer una evaluación.

"Genial" pensé. La música comenzó a sonar, era una melodía lenta, me dejé llevar. Jorge parecía adivinar todos los movimientos que iba a hacer y encajábamos a la perfección, éramos uno. En un momento de la canción dí una vuelta y el me cogió, apenas separábamos nuestros cuerpos. Me alejé de él lentamente, al compás de la música, él cogió mi mano y me hizo girar. Levanté una pierna e hice un bucle con el cuerpo. Todos los de la sala nos miraban. Unos aplaudían contentos, otros simplemente, nos miraban con curiosidad. El profesor se acercó a nosotros, aplaudiendo.

-¡Brillante! -dijo sonriente, no podía asimilar lo que hace unos segundos había sucedido".

Jorge y yo estamos sentados en un banco, el come gominolas y yo tengo los cascos enchufados al I-Pod y escucho música, uno en mi oído y el otro reposa sobre mi hombro. Voy a cambiar de canción cuando una en especial me hace sonreír.

-¿Qué pasa? -dice Jorge intrigado.

-Ponte el otro casco, he encontrado algo que te va a gustar -me hace caso y le doy al play,
instantáneamente el sonríe.


-Nuestra canción, la que bailamos aquél día...

-Así es -Se acerca para besarme y mientras lo hace, recuerdo aquel baile paso a paso,con nuestra canción de fondo. Como si volviera a revivir aquél momento.

 MARINA 

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